Los desayunos en familia, ahora que llega el buen tiempo y las vacaciones de verano, son una realidad que todos estábamos deseando que llegase. Después de muchos meses de desayunos rápidos antes de ir a la escuela o al trabajo, ahora llega el momento de relajarse y disfrutar de los desayunos en familia sin tener que estar mirando el reloj.
Poder tener tiempo para planificar, preparar y luego disfrutar del desayuno es algo básico para poder empezar el día con energía y tener vitalidad para pasar el resto del día. Sobre todo en verano, cuando las temperaturas suben y, normalmente, hacemos más vida fuera de casa hasta la hora de la comida, es súper importante desayunar de forma contundente y saludable.
Por todo esto, en el este post hemos querido reunir las mejores ideas para hacer desayunos saludables en familia este verano, con mucha fruta y alimentos naturales y con otros alimentos complementarios como las mermeladas y confituras que nos ayudarán a poner ese toque dulce a las vacaciones. ¿Estáis preparados para todas las ideas que tenemos para vosotros? ¡Os encantarán!
Contenidos
La fruta, protagonista de todos los desayunos
No existe ningún buen desayuno que se precie que no incluya varias piezas de fruta. Por suerte, hoy en día podemos incluir la fruta de muchísimas maneras en nuestros desayunos, de forma fácil y rápida. Una de estas formas es utilizar la fruta untable, en la cual su único ingrediente es nuestra fruta preferida triturada (albaricoques, fresa, arándanos, higos…) sin azúcares ni edulcorantes añadidos y que nos ofrece otra versión de la pieza de fruta para utilizar en tostadas, con yogur o para acompañar unas tortitas. Sea como sea, siempre debemos incluir fruta en nuestro desayuno en familia, ya que nos proporcionará fibra, vitaminas y minerales esenciales para el buen funcionamiento de nuestro organismo.
Tostadas de pan integral
Una de las mejores ideas para protagonizar un desayuno en familia durante el verano son las tostadas de pan integral. Gracias a este tipo de pan tendremos muchísima energía durante toda la mañana para hacer cualquier plan que tengamos pensado. Además, se pueden hacer en formato dulce, con mermeladas, confituras o la alternativa de la fruta untable, o en formato salado, acompañándolas de alguna verdura, queso o embutidos.
Bowls con yogur y cereales
Otra opción que nos encanta para estos desayunos en familia y que a los niños les suele encantar son los bowls con yogur y cereales. Podemos preparar un bol de açaí, una fruta tropical considerada un super alimento, o simplemente decorar un poco de yogur natural con frutas como el plátano o los arándanos, frutos secos como las nueces y alguna mezcla de cereales, como puede ser la granola o el muesli. Además, a estos bowls también se les pueden añadir semillas de chía o de sésamo y hierbas aromáticas como la menta o la hierbabuena.
Queso, mermelada y frutos secos
Una buena alternativa para empezar la mañana con buen pie y que encantará a esas familias con más gusto por lo salado es preparar un plato de quesos, mermeladas y frutos secos. Este tipo de platos son muy completos, ya que incluyen lácteos, fruta y frutos secos, una combinación excelente para cargarnos de energía y aguantar perfectamente sin hambre hasta la hora de comer. En este sentido, podéis decantaros por quesos batidos o curados, según vuestros gustos y mezclarlos con mermeladas de todos los sabores y frutos secos como las almendras o los pistachos o, incluso, alguna fruta deshidratada.
Batidos y granizados de frutas
Los batidos son, probablemente, los reyes de los desayunos de verano en familia. Con solo tener en casa una batidora de vaso, podremos hacer todo tipo de batidos y granizados que mezclen nuestras frutas favoritas con hierbas aromáticas, semillas, lácteos o bebidas vegetales y verduras. Son ya un clásico los batidos de fresa y plátano, de aguacate y manzana verde o de zanahorias y naranja. Además, muchos de estos batidos los podemos convertir en granizados simplemente dejando congelada la fruta del día anterior y triturándola en la batidora con algún líquido. ¡Probad esta idea, porque estamos seguros de que enamorará a pequeños y mayores!
Huevos revueltos
Los huevos revueltos son una alternativa ideal para un desayuno energizante. La gran ventaja de los huevos revueltos es que podemos tomarlos con muchísimos otros ingredientes saludables para conseguir un desayuno sabroso y sano a partes iguales. Una buena opción puede ser combinar los huevos revueltos con salmón ahumado o embutido de pavo y añadirle alguna verdura como las espinacas o un buen aguacate maduro. Con todo esto, tendremos un plato de desayuno completo y nutritivo que, combinado con una pieza de fruta o una tostada con mermelada puede convertirse en nuestra primera comida de referencia para este verano.
Tortitas sí, pero sin azúcar
Si hay un desayuno que le encanta a cualquier niño y que reúne la característica de ser muy fácil de preparar para los adultos esas son las tortitas. No obstante, es importante que, para que sean un alimento saludable para un desayuno en familia, las hagamos en casa y evitemos el uso de azúcares. De esta manera, podemos hacer unas riquísimas y sanas tortitas con harina de avena, plátano y arándanos, utilizando el azúcar de la fruta para endulzar la receta. Además, este tipo de desayunos son perfectos para añadir al plato algo de fruta untable o, directamente, fruta troceada.
Muesli o granola con bebida vegetal
El muesli y la granola son combinaciones de cereales saludables que podemos implementar en cualquier desayuno sano para toda la familia. Con mezclar alguno de estos dos alimentos con un vaso de leche o bebida vegetal estaremos disfrutando de un plato lleno de nutrientes y que nos aportará un montón de energía para sobrellevar el día hasta la hora de comer. Estas mezclas de cereales se pueden comprar en el supermercado o prepararlas directamente en casa, combinando cereales y frutos secos con algún otro ingrediente como la miel o la mermelada de frutas para conseguir un resultado crujiente y que nada tiene que envidiar a los insanos cereales ultraprocesados a los que estamos acostumbrados.