Son muchos los casos en los que, como administradores de comunidad, tenemos conocimiento de aparición de grietas, de mayor o menor entidad, que surgen de forma repentina y esto, a veces, nos genera la inseguridad de no saber a qué se deben, de pensar que son un fenómeno aislado y los tramites u obras a desempeñar son complejos y costosos, pero sigue leyendo, quizá te interese.
Las modificaciones de suelos, por lavados derivados de pérdidas de agua de saneamiento o pocería, aquellos que por su naturaleza tienen un comportamiento retráctil o expansivos, faltos de resistencia etc. son uno de los peligros geológicos más costosos y generalizados a nivel mundial, con costos estimados en varios miles de millones de euros anuales. Estos suelos presentan importantes desafíos geotécnicos y estructurales para cualquiera que desee construir sobre ellos y, aún más, para aquellos ya construidos que deben acometer obras de rehabilitación.
Estos movimientos generan grietas en paredes que se localizan, sobre todo, en esquinas de ventanas y puertas, tanto en tabiquería interior como en fachadas y elementos estructurales.
¿Cómo podemos solucionarlo?
Existen diferentes métodos dependiendo de si hacemos un refuerzo estructural, mediante micropilotes o incrementos de base de cimentación, o técnicas de mejora de terreno.
Aquí comentaremos la consolidación y mejora del terreno mediante inyecciones de resinas expansivas de la empresa GEOSEC. La baja invasividad de su puesta en obra, la limpieza y rapidez son los elementos evaluados para exponer esta técnica de intervención. Su ejecución evita la paralización de actividad de comercios, el desalojo de inquilinos en los bajos, las demoliciones y reposiciones y todos los gastos que estas puedan ocasionar.
Se realiza mediante medios manuales, en ningún momento se introduce maquinaria en la zona de intervención, desde el exterior del edificio, con pequeñas perforaciones de un diámetro de 25mm, se introducen unos tubos de aluminio que se orientan a las diferentes profundidades del terreno a mejorar.
A través de los mismos se inyecta la resina de poliuretano que, en el terreno, tendrá una acción de refuerzo e impermeabilización, rellenando los huecos y cavidades presentes, saturando la porosidad, eliminando el agua y confinando el terreno para que no vuelva a sufrir modificaciones en el futuro. Este tipo de soluciones están garantizadas, según establece la ley, por un periodo de 10 años.